El trabajo realizado por los trabajadores de la PNA se enmarca en el Operativo Verano Seguro y cuyo despliegue ya ha salvado la vida de decenas de personas que han sufrido diferentes situaciones de riesgo.
La emergencia que se produjo esta madrugada comenzó cuando se recibió un llamado en el que se escuchaban gritos y un hombre que pedía auxilio debido a que su catamarán se había quedado sin propulsión y no lograba controlarlo por los fuertes vientos.
Inmediatamente, los ¿trabajadores de la PNA activaron el protocolo de búsqueda y rescate: un guardacostas y dos lanchas, con personal especializado a bordo, se dirigieron a la zona del siniestro, en donde se registraba un fuerte oleaje. A la vez, unidades terrestres rastreaban la costa del río y de los arroyos Mandisoví Grande y Chico.
En medio de un intenso rastrillaje por el área, y en la oscuridad, los efectivos de la Autoridad Marítima nacional pudieron encontrar a las siete personas que flotaban en el agua con sus chalecos salvavidas colocados y sujetándose a una conservadora.
De inmediato, el personal de la institución los puso a salvo a bordo del guardacostas, en donde les realizaron las primeras asistencias. Además, se constató que la embarcación se había hundido en una zona donde la profundidad alcanza alrededor de 25 metros.
Una vez arribados a la dependencia de Prefectura en la ciudad de Federación, una médica del hospital San José atendió a las víctimas y les diagnosticó un cuadro de deshidratación leve, indicando el tratamiento a seguir.