El veterinario Mario Fischer explicó a medios locales que se venía haciendo seguimiento con hisopados semanales, sospechando que, en cualquier momento, por la proximidad, podría aparecer otro caso. El lunes se tomaron muestras en la granja donde se ha detectado el segundo caso y el martes se confirmó el resultado positivo en 20 muestras. La granja cuenta con una capacidad de 15 mil aves y dos de sus tres galpones estaban ocupados con 10 diez mil ponedoras.
El establecimiento en cuestión se encuentra a 200 ó 300 metros del caso anterior que se detectó en la zona y el dueño de la granja es familiar de la persona que fue afectada anteriormente y era la granja más cercana. Fischer aseguró que no se sabe si se pudieron haber contagiado en el mismo momento que la anterior o si un ave pudo haber trasladado el virus a esta otra granja, ya que todas las variables pueden ser posibles.
Ante esta situación, se ha iniciado un protocolo de seguridad que incluye hisopados en todas las granjas ubicadas en un radio de 10 kilómetros alrededor del punto cero y se seguirá hisopando cada 14 días con el SENASA a todas las granjas cercanas. Además, se extremarán las medidas de bioseguridad para prevenir la propagación del virus.
Es importante recordar que la gripe aviar es una enfermedad altamente contagiosa que afecta a las aves y puede transmitirse a los seres humanos. Por ello, se recomienda a la población que evite el contacto con aves enfermas o muertas y que adopte medidas de higiene adecuadas, como lavarse las manos con frecuencia y cocinar bien los productos avícolas antes de consumirlos.
Este segundo caso de gripe aviar en Entre Ríos es motivo de preocupación para las autoridades y la población en general. La adopción de medidas de seguridad y el seguimiento de protocolos adecuados son fundamentales para prevenir la propagación de la enfermedad y garantizar la seguridad de las aves y de la población.