El impacto de estas altas temperaturas en la salud de las personas, el medio ambiente y la economía es alarmante. Las temperaturas extremas han afectado a la salud de las personas, y han puesto en riesgo la vida marina y la capa de hielo del planeta. Además, el aumento de las temperaturas en los océanos puede tener efectos en cascada que aún no se conocen.
Según Christian Garavaglia, de Meteored, "es imperioso actuar en consecuencia". Las medidas que se tomen para combatir el cambio climático son cruciales para reducir el impacto de las altas temperaturas en el planeta.
Desde mayo, la temperatura media mundial de la superficie del mar ha estado muy por encima de los valores observados anteriormente para la época del año. Esto ha contribuido a que el mes de julio haya sido excepcionalmente cálido. Este aumento de temperatura en los mares puede intensificar huracanes y acelerar el derretimiento de las mayores capas de hielo del planeta.
Las temperaturas récord han afectado a diferentes partes del mundo. En Estados Unidos, el Valle de la Muerte registró una temperatura de más de 50 grados el 16 de julio. En Asia, se han observado temperaturas extremadamente elevadas y se registró el récord de calor nacional en China con 52,2 grados el mismo día. En Europa, Cataluña registró el día más caluroso de la historia y se batieron récords de temperatura mínima diaria en otras partes de España.
Estas olas de calor récord están directamente relacionadas con el cambio climático antropogénico. Es necesario tomar medidas urgentes para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y frenar el calentamiento global. La lucha contra el cambio climático es una tarea global que requiere la cooperación y el compromiso de todos los países del mundo. Solo así podremos garantizar un futuro sostenible para las generaciones venideras.