YPF era la única compañía que no había modificado sus precios hasta las primeras horas de este miércoles, lo que provocó largas filas en sus estaciones de servicio debido a la diferencia con sus competidoras.
Las petroleras privadas ya habían aumentado los precios desde la medianoche del miércoles, con incrementos que oscilan entre el 23 y el 27 por ciento.
Este primer aumento del año en los combustibles se produce después de dos incrementos en diciembre, lo que suma un ajuste de casi el 90 por ciento en menos de un mes, considerando que los aumentos del último mes de 2023 superaron el 65 por ciento.
El primer aumento de diciembre ocurrió en la última semana del gobierno de Alberto Fernández, cuando las petroleras aumentaron en promedio un 30 por ciento sus precios. El segundo ajuste se produjo después de la devaluación del dólar oficial tras la asunción de Javier Milei, lo que resultó en incrementos del 30 al 37 por ciento en los valores de las naftas.
Se cree que la decisión de esta nueva actualización está relacionada con los recientes aumentos dispuestos por la Secretaría de Energía para el biodiesel y el bioetanol, que van desde el 28,45 al 34,44 por ciento.