"La Iglesia existe para evangelizar," afirmó el Obispo, citando al Papa Pablo VI. "Cada bautizado, cada hombre y mujer bautizados, existe para anunciar la palabra de Dios y para ser testigos de la muerte y resurrección de Jesús", acotó.
Según registró en exclusiva el móvil en vivo de MERCURIO NOTICIAS, Monseñor Zurbriggen recordó que la misión de la Iglesia no se limita a lugares lejanos, sino que se extiende a la familia, el trabajo, el barrio y la comunidad. "El auténtico Cristiano anuncia a Jesús y da testimonio del Evangelio en todas partes, todos los días, en cada lugar", dijo.
En este contexto, el Obispo destacó la importancia de la toma de posesión del padre Aníbal como "una nueva oportunidad para construir una Iglesia sinodal y misionera" ya que hay que "trabajar mucho con mucha paciencia, con mucho empeño, con mucha caridad para hacer de la comunidad cristiana una comunidad en la que todos trabajen unidos", explicó.
Monseñor Zurbriggen citó una carta del Papa Francisco a los párrocos del mundo, en la que el Santo Padre los exhorta a ser "constructores de una Iglesia sinodal y misionera".
"Ser constructor es decir poner todos los días un granito de arena sobre otro granito de arena para hacer de la iglesia, es decir de la comunidad de los bautizados, una iglesia sinodal", manifestó.
El Obispo también enfatizó la importancia de descubrir, animar y valorar los carismas de los laicos. "Cada bautizado, cada cristiano tiene que poder poner su carisma al servicio de la misión", afirmó, citando nuevamente al Papa Francisco.
"No es el sacerdote solo, no es el sacerdote el único, es el sacerdote con la comunidad", concluyó Monseñor Zurbriggen y sentenció: "Y esto es lo que tenemos que aprender porque es el querer de Dios en estos tiempos".
El nuevo párroco también invitó a la comunidad a abrazar la cruz, que siempre está presente en el camino de evangelización. "Tanto la tormenta como las espinas, si estamos unidos a Jesús, siempre son fuente de bendición, fuente de gracia y fuente de sanación", dijo.
El padre Aguilera también agradeció a su familia, a sus amigos sacerdotes y a la comunidad de Santa Rosa por su apoyo.
En un momento emotivo, el padre Aguilera reconoció al padre Marcelo Krenz, quien lo impulsó a entrar al Seminario en 1989. En ese momento fue cuando la comunidad presente en la parroquia levantó una ovación para el cura que tiene más de 90 años y sigue al servicio de la comunidad.
Y también marcó el territorio: "Te acordas Marcelo cuando me mandaste al seminario allá en el año 89, yo siempre le decía al padre Marcelo "Sí padre" y no había discusión" y dirigiéndose al sacerdote le dice: "Marcelo tengo una buena noticia, ahora te toca decir a vos "Sí, padre" y no hay discusión".
"Quería decirle al padre Marcelo gracias por su vida, por su Don, por su ministerio, que con sus 90 años que ya lo está viviendo, sigue atendiendo, sigue escuchando. El padre Marcelo no es Vicario parroquial, sino que simplemente está como siempre dice para servir con el servicio en la escucha, en la confesión, y también este servicio que quizás alguna vez me pueda cubrir", resaltó.
El padre Aguilera concluyó su discurso invitando a la comunidad a caminar juntos con la buena noticia del Evangelio. "Tenemos un gran don que es Jesús, un gran tesoro que no lo merecemos, pero el Señor confió tanto en nosotros", dijo. "Caminemos juntos, escuchemos, aprendamos a morir para que Él sea la vida, y seamos luz", finalizó.