La actividad, abierta al público y de acceso gratuito, se llevó a cabo este jueves desde las 20:00 en la sala San Martín, con importante presencia de público.

Durante la charla, se realizó un recorrido por la obra y el legado de este capitán general, profundizando en su papel fundamental en la fundación de la República Argentina moderna.

Según registró MERCURIO NOTICIAS, durante la presentación Buet destacó la importancia de Urquiza en la historia argentina, señalando que, "si bien se le considera un caudillo en sus inicios políticos, su legado trasciende el paradigma de la época, convirtiéndolo en un estadista con un proyecto de país que supera su vida personal. Este enfoque lo distingue como un político con una visión a largo plazo que comenzó a fructificar en la década de 1880, una década después de su fallecimiento".

Urquiza, quien desde temprana edad incursionó en la política al ser nombrado diputado de la costa del Uruguay, fue introducido en este mundo por su hermano Cipriano, quien ya tenía experiencia trabajando con Francisco Ramírez. "Este inicio marcó el camino de Urquiza como un militar y político, además de ser un exitoso estanciero en la región. Su vida pública y privada estuvieron marcadas por su dedicación a la estancia de su padre en lo que hoy es el departamento Uruguay, conocido como Arroyo de la China en homenaje a él".

Testigo de las guerras civiles argentinas desde su infancia, Urquiza se vio inmerso en el mundo revolucionario gracias a la participación de su padre en el Cabildo de Concepción del Uruguay. Su entrada en la escena política se consolidó al ser prisionero de Estanislao López en Santa Fe, donde comenzó a relacionarse con figuras clave del ámbito político de la época, contó Buet.

Tras ser nombrado gobernador en la década de 1840, Urquiza inició una extensa y significativa carrera política que se extendió desde la década de 1820 hasta la de 1870. Su papel como uno de los generales más importantes de la Confederación Argentina durante el gobierno de Rosas lo llevó a ser una figura central en la historia del país. Su legado perdura hasta hoy como un pilar fundamental en la construcción del Estado argentino.