Esta es la segunda vez consecutiva que la actividad fabril experimenta una contracción, confirmando una tendencia alarmante. Además, en términos desestacionalizados, se observó un descenso del 9,1por ciento en la comparación mensual.
Las empresas operaron con un 70,8 por ciento de su capacidad instalada, lo que representa una disminución de 2,3 puntos porcentuales en comparación con diciembre.
El sector industrial está siendo fuertemente afectado por la disminución del poder adquisitivo de la población y la pérdida de competitividad en los mercados internacionales, lo cual impacta especialmente a aquellas empresas con orientación exportadora. La reducción en la producción generalmente es un proceso gradual, ya que implica decisiones sobre inversiones, empleo y otros factores.
Por otro lado, la menor demanda de materias primas e insumos ha provocado una considerable disminución en la cantidad de industrias que enfrentan dificultades para reponer sus stocks. El porcentaje de empresas con problemas de reposición de stock disminuyó a un 38,8 por ciento, en comparación con el 53,4 por ciento registrado en diciembre de 2023.
Estos resultados se derivan del Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) elaborado por CAME, que se basa en una muestra de 413 industrias pyme a nivel nacional.
Todos los sectores manufactureros del segmento pyme experimentaron fuertes caídas en la comparación anual, pero los más afectados fueron "Papel e Impresiones" (-41,7%) y "Químicos y plásticos" (-35,6%).
