San Salvador ostenta el título de Capital nacional del Arroz desde hace 74 años, una distinción que data desde 1950. La Fiesta nacional del Arroz, que suele extenderse durante tres días, se celebra entre los meses de septiembre y noviembre, y tiene como objetivo rendir homenaje a los productores y trabajadores de esta importante actividad en la ciudad y su zona de influencia.
Este jueves por la tarde, en el Museo del Arroz, en una reciente conferencia de prensa, se dieron a conocer detalles sobre los preparativos de esta edición. La comisión organizadora de la fiesta, integrada por representantes del sector productivo, la industria y el municipio, se encuentra trabajando arduamente para asegurar el éxito del evento.
Entre los miembros de la comisión se encuentran Luciano Challió, presidente de la comisión y representante del sector productivo por la Federación Agraria; el contador Jorge Zambón, vicepresidente de la comisión y presidente municipal; Claudia Carruega, secretaria y representante de la industria; Amiela Hoffman; y Leonardo Robín, en representación del Centro Económico.
El presidente de la comisión, Luciano Challió, expresó su agradecimiento por la presencia de todos los involucrados y destacó la importancia de trabajar en conjunto para lograr que la fiesta se lleve a cabo en noviembre. Asimismo, se hizo hincapié en que “la fiesta pertenece a aquellos que se dedican al trabajo del arroz, por lo que la participación activa de los sectores productivos es fundamental”.
Por su parte, el presidente municipal, Jorge Zambón, resaltó el rol activo que tendrá el municipio en la organización de la fiesta, “siempre dentro de un marco de responsabilidad y cuidando los recursos”. Además, invitó a todos los san salvadoreños y a aquellos que deseen sumarse a participar activamente en esta celebración que representa la identidad de la ciudad.
Adelantó que durante varias semanas, se ha estado en conversaciones con diversos artistas, tanto a nivel provincial como nacional. Si bien algunos artistas nacionales de renombre pueden tener costos elevados, se está buscando trabajar dentro de los presupuestos disponibles para el evento. La intención es lograr una grilla atractiva que pueda satisfacer los gustos del público y brindar una experiencia divertida y entretenida durante al menos dos noches de la fiesta.
Los detalles de la grilla se estarían dando a mediados de julio.
En cuanto a la elección de la embajadora local y nacional de la fiesta, se está evaluando la posibilidad de no realizarla este año. Esta decisión se basa tanto en consideraciones económicas como en la tendencia observada en otras fiestas similares. La organización está observando cómo se desarrollan otras celebraciones y tomando en cuenta las nuevas tendencias.
Es posible que en futuras ediciones se decida explorar otras opciones o enfoques para la elección de representantes, pero en esta ocasión se ha tomado la decisión de no llevarla a cabo.
En la conferencia, se afirmó que se está considerando cómo hacerlo accesible para toda la ciudadanía, teniendo en cuenta el contexto de recesión económica que atraviesa el país. La intención es permitir que todos puedan participar de ambas actividades.
Una posibilidad que se está evaluando es ofrecer la entrada gratuita el viernes, como se ha hecho en años anteriores, y luego cobrar la entrada para los días sábado y domingo. También se está viendo la opción de organizar una especie de peña o evento similar. Sin embargo, la decisión final depende de varios factores, incluyendo los costos y la capacidad para cubrir los gastos necesarios.
La posibilidad de tener una noche de entrada libre está sujeta a la concreción de los contratos más importantes de la grilla artística. Los costos varían considerablemente, con números de renombre nacional que oscilan entre los 15 millones y los 35 millones. La intención es contratar artistas que sean del gusto de la ciudadanía y que aporten jerarquía a la fiesta, pero la variación en los costos puede dificultar la implementación de una noche de entrada libre.
El objetivo principal es que la gente pueda acceder a todas las actividades de la fiesta sin que represente una carga económica excesiva para las familias. Se busca que la fiesta sea inclusiva y que todos los residentes de San Salvador puedan participar y disfrutar de ella, tanto de la parte estática como de los espectáculos.
En este momento, la falta de precisiones sobre los costos de las entradas y los días de accesibilidad se debe a la necesidad de cerrar los contratos y evaluar los números con mayor detalle. La organización está trabajando en encontrar la mejor solución para que la fiesta sea disfrutada por todos los asistentes.