Miercoles, 24 de Agosto del 2022 - 08:56 hs.
El arma y las municiones secuestradas.
Alrededor de las 21:30 de este martes, el Móvil 401 a cargo jefe de Calle; móvil 1495 a cargo del jefe departamental y móvil de Investigaciones a cargo del segundo Jefe, se dirigen a calle Urquiza a la altura catastral 200 aproximadamente, por un llamado telefónico recibido en la sala de comando radioeléctrico que informaba detonaciones e impactos de posible arma de fuego en la parte posterior de un departamento.
Presente en el lugar, se constata que la propiedad es alquilada por un ciudadano de 57 años, junto a su esposa e hija, nos indican la pared y ventana donde escucharon los impactos y detonaciones desde los fondos de la propiedad.
La ventana afectada por los balines.
Se labran las actuaciones de estilo, constatando daños en la tela mosquitera de un ventiluz de la cocina comedor, procediendo con el secuestro de doce perdigones de plomo de aire comprimido aparentemente Cal. 5,5 mm.
Simultáneamente a las labores de rigor en el lugar del hecho, se dispuso un operativo en las inmediaciones con el fin de recabar información, testigos o personas sospechosas del accionar mencionado, rodeando la manzana, cual arroja resultado positivo, logrando identificar en un domicilio de calle Hipólito Yrigoyen al catastral 300 un departamento en la planta superior, propiedad de un joven mayor de edad, quien manifiesta que estaba en su domicilio junto a otras seis personas, entre ellos un menor y hace referencia que estaban reunidos y que tenían un rifle de aire comprimido, que habían utilizado desde una ventana hacia los fondos, el cual hace entrega en forma voluntaria, siendo un rifle de aire comprimido, sin marca ni número de serie visible, con culata y empuñadura de madera, y una caja de plástico conteniendo la cantidad de 62 balines de 5,5 mm.
La ventana de donde partieron los disparos.
Se recibe formal denuncia por el supuesto delito de daño al ciudadano damnificado.
Se pone en conocimiento de lo actuado a la Fiscalía en turno, procediendo al traslado de una persona mayor, hacia Jefatura de Policía para correcta identificación, recuperando su libertad, previo ser examinado por el galeno en turno, cuál queda supeditado a la causa judicial.
En tanto, que el menor de edad fue entregado a su progenitora en el lugar del procedimiento.
Se prosiguen diligencias de estilo.
