En la declaración enviada a MERCURIO NOTICIAS, el presidente del Consejo, el pastor Jorge Moser, expresó su "dolor y preocupación" ante los actos de violencia y destrucción que tuvieron lugar en el lugar de culto católico.
El pastor Moser recordó "el mandato de amar al prójimo como a uno mismo", y subrayó "la importancia de rechazar cualquier forma de violencia, intolerancia o falta de respeto hacia los demás, incluyendo a aquellos que comparten la fe en Cristo, aunque sean de diferentes tradiciones religiosas".
El Consejo Pastoral de Iglesias Evangélicas hizo un llamado a la comunidad para que "se una en solidaridad y para que apoye a las autoridades en la investigación de los incidentes". Asimismo, instó a que "se haga justicia de acuerdo con la ley".
El mensaje concluyó con "un deseo de paz y la esperanza de que la comunidad pueda superar estos momentos difíciles con la ayuda de la paz que sobrepasa todo entendimiento, según la fe cristiana".
La comunidad evangélica de San Salvador reafirmó su compromiso de promover la paz, el respeto mutuo y la convivencia pacífica entre todas las confesiones religiosas en la localidad.
